TIEMPOS
PÚRPURAS
Vladimir
Rothschuh
En
la Secretaría de Cultura perciben dos visiones del “descubrimiento-encuentro de
América” a partir de las diplomacias culturales del presidente López Obrador y
de la presidenta Sheinbaum. Para los nuevos funcionarios de la Secretaría de
Cultura, la pasada diplomacia cultural fue de choque y ruptura con España;
aseguran que la nueva diplomacia cultural se ufana por reconstruir la relación
con la “madre patria” superando con creces, Claudia Curiel, el desempeño de
Juan Ramón de la Fuente, como han sido los
romances entre ambas naciones a través de la Princesa Asturias, al Museo
Nacional de Antropología y a la fotógrafa Iturbide. Sumado a lo anterior, la
carambola de dos bandas con la mayor exposición mexicana en el Viejo Continente
en torno a las mujeres indígenas, que supo detonar la expresión liberadora de
José Manuel Albarez sobre los excesos de la ocupación comercial de Castilla en
la Nueva España. Así, concluyen, la restablecida relación México – España, está
a punto de turrón.
Con la magistrada Mónica Soto llegó y con ella concluye como vocero Eduardo del Río en el Supremo Electoral. Lo releva la añeja, pero joven colaboradora de Guadalupe Taddei en el INE, Carmen Urías que ha sido sumada por Gilberto Bátiz en su equipo a la nueva época que se abre con magistraturas electas por el pueblo. Homónimo de Rius y con similar talento en los medios, enriqueció Eduardo del Río el acento de género conseguido por la magistrada Soto en las sentencias del pleno: empoderando a las mexicanas desde la anónima electora, hasta el fortalecimiento feminista de los últimos dos años del Tribunal, marcados por entrambos momentos: la llegada de Sheinbaum como la primera mujer al Poder Presidencial y, su segundo tiempo, la elección de juezas, ministras y magistradas del nuevo Poder Judicial. La tilde de la magistrada Soto fue reafirmar su vocación de género a través de la Presidencia del Supremo Electoral, la cromática violeta, púrpura, cárdena, amatista, como gama simbólica señalaba que era tiempo de mujeres. Y ahí desempeñó un rol singular Eduardo del Río desde su hemisferio izquierdo. Aunque le haya cedido el bastón de mando violeta la magistrada Soto al magistrado Bátiz en el Teatro de la República, éste trae su propia agenda para los dos años en que encabezará la presidencia del Supremo Electoral.
El sentido de las giras y visitas de Néstor Vargas a los tribunales y juzgados, revelaron su importancia cuando en Guerrero, Morelos, Guanajuato, CDMX y Tabasco, no tienen siquiera papelería, ni impresoras, ya no se diga los abusos laborales. De ahí que tomara a bien y atendiera el titular del OAJ, el abanico de reclamos sobre la disfuncionalidad de los espacios para impartir justicia. Ayer mismo, la presidenta Sheinbaum sentenció que sobraban recursos de los fideicomisos de la vieja SCJN para cubrir los temas salariales.