*López Obrador y Nikola Tesla
*Más allá de lo público/privado
*Progresismo contra tecnocracia
VLADIMIR ROTHSCHUH
El presidente López Obrador ha
convocado a los priístas progresistas a sumarse al ideal de López Mateos sobre
la electricidad más allá de un bien público para trascender la reforma
neoliberal peñanietista que despojó a los mexicanos de un bien colectivo como
lo era la CFE. La reforma eléctrica de la Cuarta Transformación la tiene bien
definida el presidente López Obrador trascendiendo lo público/privado por su
universalización como un derecho humano. No ha bastado que el petróleo, el agua
y la electricidad hayan sido bienes del Estado si los mexicanos no fueron sus
beneficiarios. Elevar la electricidad a derecho humano era un incipiente motivo
social de López Mateos como lo fue la salud como un derecho público y no un
negocio en manos voraces y privadas. López Mateos deseó que la Revolución
Mexicana tardía hiciera justicia entre el pueblo pero no lo logró pues vieron
socialista el anhelo del mexiquense de que sólo las universidades públicas
formaran los nuevos galenos y sólo el gobierno procurara los servicios sanitarios.
Hoy con López Obrador la salud es para todos en sus tres niveles hospitalarios,
debiendo luchar a lomo y crin contra las
mafias batas blancas crueles que han hecho de la enfermedad un lucro criminal. La
oferta de reforma eléctrica del presidente López Obrador a los priístas
progresistas ha comenzado a ser aceptada por los tricolores del sur y sureste
que han padecido el atraso económico y los excesos de los servicios eléctricos
entre las poblaciones vulnerables que no tuvieron para pagar la electricidad de
sus viviendas. Es aquí donde asoma Adán Augusto López al lado del Presidente de
México como el resto de los gobernadores, alcaldes y legisladores morenos,
añadiéndose Alejandro Murat por el lado progresista del priísmo; así se le vio
al gobernador de Oaxaca en Veracruz al lado de su amiga Alejandra Frausto que
ha nutrido de "Cultura Comunitaria" las regiones pobres oaxaqueñas e igual
Rocío Nahle, aliada en el proyecto de Salina Cruz. Que la electricidad
trascienda lo público/privado por lo humano es un legado que vale la pena
abrazar una vez que los tecnócratas replicaron mal el neoliberalismo pese a los
desastres observados en Inglaterra con los energéticos. Alejandro Murat se ha
propuesto desmontar lo que su padre Pepe Murat construyó como miembro del Grupo
Atlacomulco en el Pacto por México con una reforma energética volcada hacia los
intereses privados y que hoy PAN y PRD defienden amenazando al PRI con una alianza de nulos resultados
comiciales. El Pacto por México a la postre resultó dañino sin entenderlo los
tricolores según el fracaso de la otra alianza de Va Por México. Definitivamente
no es una contra reforma eléctrica la iniciada por el presidente López Obrador entre
lo público/privado (51-49%) pues va más lejos con el Derecho Humano a la electricidad
como un bien de todos sus usuarios. La Cuarta Transformación trascenderá al
Milagro Mexicano y al neoliberalismo como sonora bofetada al Capitalismo que
defraudó a Nikola Tesla.
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