SHEINBAUM: SENTIDO COMÚN

 



 

Por Vladimir Rothschuh

 

El menos común de los sentidos, recitaba Carlos Marx a los anarquistas y socialistas de su época, es el sentido común. La sentencia va para todos los tiempos y cuadra bien cuando la obstrucción de una calle por reparaciones pluviales, modifica favorable e inesperadamente el conflicto vial de Insurgentes Sur, San Fernando y Santa Teresa, ocasionado por los corporativos de Carlos Slim y Salinas Pliego. La obra de reconstrucción del cárcamo de Corregidora – Insurgentes por el equipo de Gaby Osorio, movió el tránsito a calles aledañas y alivió el caos ocasionado por Bonpane, rutas de camiones y Elektra, sin imaginar lo benéfico que acabó siendo recorrer la base de autobuses como poner en desuso los estacionamientos de esos negocios. La destrucción del cárcamo es la conclusión de la mala proyección personal del entusiasta Marcelo Ebrard que diseñó personalmente el trazado del Metrobús, ya fuera talando árboles centenarios, clausurando avenidas, cambiando circulaciones y taponando bajadas de aguas. Las inundaciones desde Perisur hasta El Caminero son el resultado del mal sentido común que enmendó Sheinbaum a través de Andrés Lajous en Semovi y que ahora Gaby Osorio redescubre en un efecto mariposa positivo con su obra de Corregidora. Obviar los puentes elevados en Periférico, Insurgentes y San Fernando, para no mal aspectar los negocios de Liverpool, Plaza Inbursa y el corporativo Elektra, reafirman al paso de los años que las decisiones de Carlos Salinas, Ernesto Zedillo, Cuauhtémoc Cárdenas y Felipe Calderón, fueron erradas y merecen corregirse; siendo que la otra Mafia Inmobiliaria de Camachos,  Bejaranos y Chuchos, arrasaron zonas de reserva, invadieron baldíos, privatizaron ejidos y elevaron multifamiliares, agotando recursos  y saturando calles que se recorren en un minuto por metro. Lo que empuja a Gaby Osorio a consultar a Andrés Lajous cómo resolver el mal diseño de movilidad y que la presidenta Sheinbaum atiende con la línea 4 del Cablebús que aligerará los desplazamientos populares desde Los Pedregales hasta Metro CU.  La Línea 4 del Cablebús fue un compromiso adquirido por Sheinbaum en campaña para su terruño y aunque haya sido una oferta en beneficio de la Ciudad de México, los recursos, diseño y trazado corre por cuenta  del Gobierno de México como ocurrió con los Senderos Seguros que dieron calidad al grueso de las mujeres trabajadoras tlalpenses; de otra forma, la añeja promesa de la alcaldesa Sheinbaum a sus vecinos habría quedado en la elocuencia que empobrece al pueblo y enriquece a los políticos tradicionales y que ella conjuró, atendió y remedió como Jefa de Gobierno y ahora como Presidenta de México.