SOMOS PRESIDENTAS

 



Vladimir Rothschuh

 

Fin de semana intenso el de la presidenta Sheinbaum recorriendo desde el viernes Oaxaca para inaugurar la carretera Mitla – Tehuantepec en beneficio de 1.4 millones de personas, al día siguiente dio el banderazo de salida a la Comisión General Lázaro Cárdenas del Río para la mixteca oaxaqueña que tendrá acciones más allá del Balsas en bienestar social de las comunidades oaxaqueñas, surianas y poblanas; ese mismo día acompañada de Citlalli Hernández entregó las tarjetas de la Pensión Mujeres Bienestar que en Oaxaca beneficiará a 50 mil mexicanas y el domingo desde Puerto Escondido, anunció el envío al Congreso de las reformas al 4 y 27 constitucionales para proteger al maíz mexicano, prohibir la siembra de  transgénico y avivar técnicas agroecológicas donde la mixteca sobresale por su sistema de milpas como la maya y la mexica. Días antes también en la mixteca y en Juchitán en un fervor artístico, entregó Claudia Curiel en representación de la Presidenta junto a Salomón Jara, el renovado museo Lidxi Guendabiaani que reúne obras de Toledo, la restituida Parroquia de San Vicente y el restaurado  ex convento  dominico, pilar de nuestra preservación de legajos históricos que permitieron reconstruir a Cook y Borah  siglos después el mejor perfil  de demografía ambiental del virreinato. La presidenta Sheinbaum rodeada de mujeres oaxaqueñas exaltó “llegamos con todas las mujeres mexicanas, con las de antes, con nuestras ancestras, llegamos con nuestras bisabuelas, nuestras abuelas, llegamos con nuestras madres, y también, llegamos con las futuras generaciones, llegamos con nuestras hijas y llegamos con nuestras nietas. Todas las mujeres mexicanas deben sentirse Presidentas de la República, porque están aquí conmigo gobernando el país, por eso me siento fuerte”. Escogió Oaxaca la presidenta Sheinbaum como sede ancestral del maíz nativo para culminar una lucha de décadas en la defensa de las 59 variedades del grano criollo, porque como secretaria de Sedema, como alcaldesa y Jefa de Gobierno, insistió en proteger nuestra identidad a través del oro vegetal puesto que eso definía a México: sin maíz, no hay país. La fiesta de los oaxaqueños de este fin de semana celebró en el mismo ánimo de la presidenta Sheinbaum, nuevas infraestructuras carreteras, escuelas, caminos rurales, agua potable, cooperativas, exaltación a sus fuentes artísticas y especialmente el garantismo de sus mujeres.