*Oaxaca, joya de la 4T
*El sueño mexicano y Biden
*Murat al equipo federal
*Ferrocarril e infraestructura
sanitaria
VLADIMIR ROTHSCHUH
Al terruño tabasqueño prefirió el
presidente López Obrador dejarlo a un lado entre las joyas de la corona que han
recibido las mayores inversiones de gasto social como Oaxaca, Chiapas y
Guerrero. Arrancando su agenda semanal desde Oaxaca el Presidente recorrió las
obras de infraestructura que unirán y desarrollarán ambas costas desde Salina
Cruz hasta Coatzacoalcos, infraestructura no solamente ferrocarrilera sino en
salud como lo evidencia Luis Antonio Ramírez semana a semana reconstruyendo las
abandonadas unidades médicas del ISSSTE. El nuevo trato con el sector salud
oaxaqueño y el federal lo despejó el presidente López Obrador al proponerse
como facilitador de los trabajadores sanitarios que piden basificación ante el
Insabi y el IMSS. En la carta llevada
por Ebrard a la Casa Blanca, el presidente López Obrador amplió al presidente
Biden la urgencia de crear esas cortinas naturales de prosperidad en el sureste
mexicano que detendrían los flujos migratorios y que este fin de semana se
elevó a la máxima potencia en la CELAC al lanzar la iniciativa el presidente
López Obrador de una Unión de las Américas como la Europea creando cadenas de
valor desde Chile hasta Canadá, un sueño bolivariano que supera en todo sentido
a la CELAC y al grupo Alba. En Toluca el entonces Vicepresidente Biden formó
parte de una iniciativa de desarrollo México – Estados Unidos con las áreas Económicas
Especiales en el Sureste y que no fueron más allá de sus intenciones. La pobreza
es mala amiga y pésima consejera, señoreando cada caravana de indocumentados
que buscan dejar sus países en busca del sueño americano y que de algún modo
con el desarrollo del sureste por la Cuarta Transformación se está convirtiendo
en el Sueño Mexicano. El presidente López Obrador mencionó los diez parques
industriales que se instalarán a lo largo de la nueva zona del ferrocarril de
carga y de personas y que ya son atractivos a los inversionistas
internacionales debido a los incentivos fiscales
de Ramírez de la O. Esas tres joyas Oaxaca, Chiapas y Guerrero tienen además de
la asistencia social del Estado de Bienestar la inversión en infraestructura,
su paradigma se lo externó el presidente López Obrador al presidente Biden y
que se ensaya en Honduras, El Salvador y Guatemala con el programa Sembrando
Vida. Queda claro que ese programa que encabeza Javier May no es suficiente cuando
ha debido cerrar fronteras Estados Unidos a la ola de haitianos que huyen de la
crisis humanitaria de su país. Hay que extender el modelo de desarrollo del
presidente López Obrador hasta la Patagonia, respetando las soberanías de cada
pueblo. En menos de un año deberá estar listo el tren de Salina Cruz a
Coatzacoalcos y la promesa del presidente López Obrador es que lo deje
inaugurado el gobernador Alejandro Murat antes de cerrar ciclo en dicho estado
y abrir otro en la administración del presidente López Obrador, porque Murat ha
sido otro de los gobernadores que ha sabido trabajar codo con codo con el
Gobierno de la República como lo hicieron Quirino Ordaz y Antonio Echevarría.
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