EL ÁGORA DE LA SCJN





*Políticos obstruccionistas
*Revocación del presidencialismo
*La Revolución del Sur
*Neoliberalismo en la SEP
*PND de las mujeres


VLADIMIR ROTHSCHUH


El presidente López Obrador se ha convertido en el ensayo de prueba y error democrático atajando los excesos de los halcones extremistas que acompañan a su administración. Ha respaldado en los hechos el Primer Mandatario sus promesas de amnistía y de amor y paz a sus adversarios por lo que no será obstáculo a su itinerario aceptar las indicativas de PAN, PRI y PRD acerca de que la consulta de Revocación de Mandato no se haga en el 2021 sino después de los comicios y bajo la regulación del INE. Los datos están a favor de López Obrador cuando se ha opuesto a ser usado en las disputas internas de su partido porque desde el uno de diciembre pasado es el Presidente de todos los mexicanos y no el cabecilla de un partido político. Los hechos amparan al presidente López Obrador cuando aceptó los señalamientos de la derecha empresarial sobre los contenidos propagandísticos de algunas Secretarías de Estado ordenando en público a sus colaboradores dar marcha atrás a esos abusos que identifican al pasado neoliberal que usó al gobierno como casa de campaña y al erario como caja chica partidista. Con esos grandes positivos democráticos a su lado, resulta una tormenta en un vaso de agua en el Senado cuando tiene Ricardo Monreal antecedentes benéficos para encausar el exceso de los diputados que han confundido la figura presidencial y a la 4T en una pandilla facciosa como solían hacerlo Fox y Calderón cuando celebraban en Los Pinos aquelarres albiazules. Entre menos entretengan Monreal y Batres ese falso debate sobre un López Obrador que no es el que pintan sus adversarios políticos, ensancharán la realidad de la gran transformación democrática encabezada por el Presidente de México distante y distinto del viejo presidencialismo autoritario


La Suprema Corte globaliza el derecho ciudadano a las redes sociales de los servidores públicos como lo hizo su par norteamericana contra el presidente Trump por bloquear en Twitter a sus críticos. En México ningún proceso en contra de Twitter tiene alcances legales sino que deben radicarse en la Corte de California siendo las más de las veces que dicha red es quien violenta a sus usuarios plegándose a los intereses de los gobiernos en turno responsables de quebrar no sólo ese derecho sino el constitucional de audiencia que goza todo mexicano. En el gabinete presidencial de López Obrador hay un grueso de funcionarios que han bloqueado en Twitter a sus seguidores incómodos y ni qué decir de los que no tienen redes sociales y se jactan de ir contra corriente del gobierno digital que dirige Jesús Ramírez Cuevas. La SCJN ensancha los canales del ágora democrática digital con esta sentencia convergiendo este triunfo con otros fallos recientes como el daño moral que alegaban jueces y magistrados en redes sociales para evitar casos y que derivó hacia el resto de funcionarios del Estado: como servidores públicos no existe agravio alguno de ciudadanos que recurren a las redes sociales con lenguaje ofensivo o altisonante. Los ministros son la muestra de cómo han soportado los peores insultos especialmente de la izquierda que apenas hace poco se apoderó de la puerta principal del Palacio de Justicia en el Zócalo de la CDMX. Antes que el efecto dominó de este fallo de la SCJN bajo la presidencia de Zaldívar llegue contra los miembros del Gabinete Legal y Ampliado de la 4T, deberá ordenar Jesús Ramírez Cuevas a todos los funcionarios de las dependencias  a desbloquear a  sus seguidores como sumarse a la tolerancia que el presidente López Obrador mantiene en Twitter y Facebook sin obturar a ninguno de sus fans.


La cuna del zapatismo curiosamente no está en los Altos de Chiapas sino en el ombligo de la Revolución del Sur en Tlaltizapán de Morelos. Los 108 años del movimiento encabezado por Emiliano Zapata queda de memoria entre los suyos que deben hacer pervivir su memoria como lo hizo Alfredo Domínguez y su comunidad en San Pablo Hidalgo. El inicio del movimiento revolucionario encabezado por el Caudillo del Sur es contiguo a los festejos nacionales al Benemérito de la Patria  y sobre el que ahora rigen los pilares sexenales de la Cuarta Transformación, pero no sobre el origen social de la tierra, el ejido, que sigue superando en su modelo de tenencia agraria a los rusos con sus koljoz y a los israelitas con sus kibutz.  Domínguez Mandujano echó la casa por la ventana en la modestia de una administración municipal en lo que será también su propia revolución doméstica sobre los usos y costumbres de un Tlaltizapán presionado por la degradación de las opulencias comerciales de Jojutla y Jiutepec sinónimos de las nuevas Gomorras castigadas por sismos, prostitución y violencia. Los 108 años del inicio de la Revolución del Sur sigue manteniendo vivos sus idearios en la percepción del edil Alfredo Domínguez, porque la traición neoliberal sobre el ejido milita en el silencio cómplice de los últimos sexenios tolerantes de la aniquilación constitucional del artículo 27 traicionado como también  es traicionado Juárez con su reforma anticlerical revertida en el 130.


Esteban Moctezuma es un hombre inteligente y con experiencia para seguir aguantando los ‘garlitos’ del neoliberalismo sobreviviente en las entrañas de la SEP. Los vicios de Chuayffet y de Nuño se muestran con el bloqueo de la CNTE a los trabajos de San Lázaro sobre la reforma educativa, son vicios que vienen de las entrañas de los expertos educativos amos y señores de la instrucción pública nacional que sobreviven los sexenios y regresan disfrazados de imposturas como Guevara Niebla por ejemplo u otros que le agregaron a Moctezuma provenientes del equipo de Josefina apropiados de los delicados nervios informativos de la SEP y responsables del ‘garlito’ de su titulación en derecho por la UNAM. Convive Moctezuma en un nido de serpientes y no con las víboras de la CNTE como tratan de hacerle creer los factismos renuentes a abolir las diferencias entre el magisterio nacional. Tampoco se puede celebrar la impericia de Mario Delgado en San Lázaro preocupado más en atender la agenda transexenal de Ebrard que enfocarse en los intereses de la Cuarta Transformación. ¿Será acaso que el Camachismo sigue sin perdonarle a Moctezuma la Pacificación de Chiapas? El presidente López Obrador sentenció a su Gabinete por los escasos resultados en los primeros cien días de gobierno, Moctezuma debió hacer lo mismo con sus colaboradores que confunden la transformación educativa en la celebración fatua del chambismo brincando sexenio tras sexenio en las oficinas públicas. La CNTE no es adversaria de nadie como tampoco lo son López Obrador y Esteban Moctezuma de nadie, entonces dónde está el ‘garlito’ incendiario y punitivo de San Lázaro con una Coordinadora responsable de construir el triunfo moreno ¿en el EZLN, en TVAzteca?


Con Nadine Gasman en Inmujeres se ha incrementado la relación de este Instituto con la Secretaria de Gobernación. Imprime Sánchez Cordero la identidad de género otorgándole a la agenda de las mexicanas prioridad que no tuvo mientras los ‘hombres’ desfilaron por el despacho de Bucareli. Hoy la ex ministra de la SCJN preside el foro de consulta sobre el PND y los nueve retos de la 4T que son: Igualdad de género, no discriminación e inclusión y los Objetivos de Desarrollo Sostenible; La violencia contra las mujeres y las niñas: un problema multidimensional;  Participación plena y efectiva de las mujeres en la toma de decisiones en la vida política y pública; Inclusión plena y efectiva de las niñas y las mujeres en la educación;  Salud de las mujeres, Derechos sexuales y derechos reproductivos; Enfoque intercultural y enfoque de desarrollo territorial (mujeres indígenas y afromexicanas; Empoderamiento económico de las mujeres y finalmente,  Retos y desafíos para la participación de las mujeres en la economía nacional: trabajo no remunerado, programas sociales, trabajo de cuidados y programas productivos. El horizonte de las mexicanas en el PND será multifactorial e inclusivo con el mejor aval que puede haber en el interés de Sánchez Cordero por una renovada perspectiva con acciones de Estado.