*Austeridad en el INE
*Feria y diplomacia cultural
*Bálsamo en la CFE
VLADIMIR ROTHSCHUH
El equipo de Yeidckol Polevnsky ha
seguido de cerca los últimos eventos partidarios por Morelos. La lideresa
nacional de Morena mantenía bien diagramado el terreno político bajo la
administración de Cuauhtémoc Blanco porque a Yeidckol no le ofrecía todas las
confianzas el gobernador que llegó con el respaldo morenista y que una vez en
el poder rompiera los acuerdos contraídos en campaña. Un liderazgo combatido por los adversarios
partidistas adquiere solidez porque se trata de una lucha de contrarios, pero a
la vista de Polevnsky, es desacertado cuando se enmarca en una disputa sorda e
intestina entre quienes ganaron el poder presidencial, legislativo, municipal y
estatal. Polevnsky ha apostado por la conciliación en Morelos y lo manifestó
acudiendo a la toma de posesión de Rafa Reyes a la que asistió también
Cuauhtémoc Blanco; Morena en la entidad es una fuerza política visible y
ostensible, sobre esa realidad cree la líder nacional morenista debe fincarse la simetría del poder estatal y
es lo que evidenció acuerpando al edil de Jiutepec en el cual vislumbra apuntalar
estatalmente la autoridad partidaria y presidencial de López Obrador. Rebosa Yeidckol
Polevnsky de autoridad partidaria y de acrecentada confianza ante el Presidente
de México. Para ella, solamente la unidad en torno de la legitimidad de López Obrador podrá
mantener el rumbo transformador, toda vez que los enemigos ya no están en la
Mafia del Poder sino en casa.
La creatividad se encuentra entre las
mejores salidas que tiene Lorenzo Córdova para enfrentar la austeridad
presupuestal expuesta por el INE a
Carlos Urzúa. Algunos consejeros incómodos con la ley de salarios máximos buscan conflicto y sobre el hecho han exagerado una propuesta de aplicarle a Urzúa la
ley del talión, que como tal no es muy acertada para cualquier caso. La
alternativa de la mayoría consejera del INE es dejar de cubrir el Instituto
Electoral sus obligaciones fiscales. Hay consejeros, que no es el caso de Lorenzo
Córdova, que ponderan que se le debe pagar con la misma moneda a la Cuarta
Transformación yendo hasta el lopezportillismo declarando una moratoria a sus
acreedores, en este caso a la dependencia de Urzúa y todo en aras de mantener la calidad técnica
en los procesos electorales de este año. Dejarle de pagar a la SHCP es un tema
arriesgado a tolerar por Urzúa porque se le estará dando lecciones de gallina
come huevo al universo de contribuyentes que por ajustar sus finanzas privadas
acaben afectando las finanzas públicas. Es un derecho humano la subsistencia y
entre cubrirle al SAT o soportar la empresa el dilema casi siempre es apoyar a
los trabajadores y arreglárselas más tarde con el fisco. La oferta de los
consejeros electorales a Lorenzo Córdova es común entre los deudores del SAT
que adquieren créditos fiscales, entran en moratoria, se declaran en quiebra y
la SHCP los rescata con un subsidio como ocurrió en sexenios pasados con los
grandes empresarios. Y en la creatividad requerida por Lorenzo Córdova
está aproximarse a Carlos Urzúa para
evitar las distorsiones de un diálogo de sordos y público cuando las
resoluciones más frescas radican en la cercanía de los acuerdos.
La cultura es transformación pero es
un proceso de larga data e inacabado siendo llamativo que Alfonso Suárez del
Real mantenga esa munificencia en el legado que recibe como Secretario de
Cultura de la CDMX, cuando detalló el origen y devenir de la Feria de las
Culturas Amigas. No por emerger ese evento bajo el sino de la peste porcina del
calderonismo, quedó tiznado aun cuando el mancerismo lo mantuvo en su
administración. Más bien Suárez del Real destaca las virtudes de un evento que
reúne las culturas de 75 naciones amigas representadas en el cuerpo diplomático
y que no desaparece por la llegada de la Cuarta Transformación y su crítica al
pasado ilegítimo de administraciones que usurparon el poder, porque el
referente exacto es la administración capitalina de Marcelo Ebrard quien desde
entonces apuntaba en la CDMX a una visión internacionalista y que hoy con
Alejandra Frausto ha elevado a diplomacia cultural. La décima edición de esta fiesta de las
culturas, se vuelve circunstancia para que los gobiernos de Sheinbaum y de
López Obrador converjan en esa feria en Chapultepec y el nuevo espacio cultural
de Alejandra Frausto en Los Pinos, ahora sí recuperando la esencialidad
amigable de la izquierda en una ‘ciudad abierta, incluyente, multicultural y
garante de los derechos de sus habitantes y visitantes dentro de un marco de
cultura de paz’.
Después de las bonificaciones,
compensaciones y salarios millonarios al penúltimo titular de la CFE que pasó a
ser líder partidario, los cien mil pesos
devueltos por Manuel Bartlett a la Tesorería, son un bálsamo a la honestidad
merecida por esa noble institución de todos los mexicanos. Conforme a la ley de
remuneraciones Bartlett ciñó su sueldo debajo de lo que gana el presidente
López Obrador, porque no se trata de ganar lo mismo que el primer mandatario sino de guardar las formas abajo del Jefe de
Estado. Por su capacidad Bartlett ha encabalgado sinuosamente la
responsabilidad de la Cuarta Transformación de mantener el servicio eléctrico
en todos los hogares del país, afortunadamente el ex senador no es criador de
vacas para llegar a sentarse en la CFE con bostas en sus zapatos y a
conflictuarle a cada mexicano, pero en especial al Presidente de México, su
cotidianeidad. La eficiencia eléctrica, no se cansa en repetirlo Bartlett,
depende de sus trabajadores con los que ha establecido una armonía laboral
donde el Suterm es el primero en reconocerle al nuevo Director sus habilidades
administrativas que apuntan a cumplir las promesas de López Obrador a cada una
de las familias afectadas por altas tarifas, cortes, fallas y diablitos.
https://twitter.com/VladRothschuh