*Posverdades fakeministas
*Corrupción partidocrática
*Del huachicol al feminicidio
*Autoridad calderonista y elbista
*Autoridad calderonista y elbista
VLADIMIR ROTHSCHUH
Cerró la semana Irma Eréndira Sandoval en los
discursos del presidente López Obrador sobre la hipocresía de la derecha ‘fakeminista’
y las simuladas eminencias dedicadas a lucrar con la salud de los mexicanos. Mientras
varios Secretarios del Gabinete se escondieron estos días con las embestidas de
los neoliberales y hasta las apoyaron, la Secretaria de la Función Pública
demostró tener un sólo compromiso moral e ideológico con el proyecto del
presidente López Obrador para transformar a México. Acompañó Irma Eréndira
Sandoval en los hechos y en el discurso al presidente López Obrador sobre la
utilización del dolor de las mujeres víctimas del modelo neoliberal y
revictimizadas por quienes las malversan de pretexto politiquero; igual asistió
la titular de la SFP la limpieza de Jorge Alcocer en los hospitales de tercer
nivel dedicados a dinamitar el proyecto social nórdico en el Insabi. De ninguna
manera se dobló Sandoval Ballesteros aceptando formar parte de un gobierno feminicida
para decir ‘llegamos tarde’, dando pie a los adversarios del presidente López
Obrador en su oportunismo 'fakeminista'. A todos los que han protestado el Presidente
de México ha respetado sus libertades de
disentimiento: a los papás de los niños con cáncer, a las abuelas de las
estancias infantiles, a los niños y mujeres en el huachicol, jamás los condenó la 4T porque comprendió que
detrás estaban los autores intelectuales de esa mano negra que los movía. Siendo
para el Insabi lo más reciente de las ‘eminencias delictivas’, sancionadas por
la SFP pues dirigían los hospitales de especialidades con propósitos perversos
al interés de la salud de los mexicanos. A los Secretarios del Gabinete que
tienen una conducta privada y otra pública, Irma Eréndira Sandoval les demostró
que ella solamente tiene una ética y una camiseta para sus horas de funcionaria
pública y para su vida privada, como es la conducta ejemplificada del
presidente López Obrador que no es Jefe de Estado de las seis de la mañana a
las nueve de la noche. Contra esa enfermedad burocrática de la asepsia
ideológica, alertó Trotsky la decadencia de la transformación de octubre, misma
a la que se enfrenta la 4T con funcionarios de ocho horas y ‘ciudadanos libres
de conciencia’ por las restantes 16, según demuestra Irma Eréndira Sandoval
confrontando las posverdades conservadoras del ‘fakeminismo’.
El financiamiento a los partidos
políticos con dinero de los contribuyentes al SAT, sostiene la crisis de la
democracia mexicana que inauguró el salinismo cuando creó el IFE y aletargó la
transición financiando una partidocracia y la corrupción de las élites de poder
y familiares. Hoy mismo, Elba Esther y Margarita Zavala representan ese
dislocamiento al regresar de sus errores políticos y sindicales con dos nuevos
partidos en el INE alimentados con los recursos de los mexicanos. El pluripartidismo
alguna vez tuvo sentido en el régimen de Partido de Estado, pero desde el dos
mil ese origen debió modificarse cerrando el paso a la parasitosis
partidocrática, siendo ahora urgente su actualización no sólo con los salarios
máximos de sus Consejeros sino también de su temporalidad que ha dado al traste
con el legado maderista de no corromper el servicio en la reelección de su
Secretario General o los más de seis años de los miembros del Consejo. La falta
de candados contra la resurrección del calderonismo y del elbismo, son dos
perlas en la agenda del Legislativo cuyo sucedáneo son las cientos de ONG´S que
especularon con los recursos de bienestar social y limitadas a partir del 2019.
El modelo del INE no es para favorecer la democratización de México sino para
alentar su parálisis posdemocrática a través de porcentajes de votos, padrón de
militantes, renovación de dirigencias, asambleas y afiliados. En los papeles
todos cumplen ante el INE, en la realidad política ese formalismo se derrumba
como lo expresan las legitimidades de Felipe Calderón y Elba Esther Gordillo.